¿Qué es esto?

Soy un fan español de Harry Potter que quiere hacer un análisis completo de toda la saga del chico de la cicatriz, intentando destacar temas recurrentes, elementos que reaparecerán más adelante o que han aparecido después y cambios producidos en la traducción española de la saga (que no son pocos), además de curiosidades varias, para así algún día llegar a una perspectiva total de todo el universo Potter.

Cada lunes o martes habrá un post nuevo de cada capítulo de la saga analizándolo al detalle, y cuando acabe uno de los libros se hará un análisis de la película correspondiente, también habrá reseñas de la saga de Animales Fantásticos cuando vayan saliendo, así como del libro de El Legado Maldito al terminar la saga.

Asimismo, la primera semana de cada mes postearé una traducción personal de alguno de los textos que Rowling publicó en Pottermore y que ahora han quedado tristemente inaccesibles para los fans que no sepan inglés con la nueva versión. además de algunas aclaraciones sobre juegos de palabras, localizaciones, etc., y curiosidades que a lo mejor no sabíais.

Huelga decir que habrá spoilers a mansalva; si queda alguien en este planeta que no sepa las sorpresas típicos de la serie y no quiera saberlas que no se meta aquí. Queda avisado.

Cualquier comentario o sugerencia es bienvenido; ¡dejad vuestras impresiones tras leer!

lunes, 20 de junio de 2016

Capítulo 6: El traslador

En el capítulo 6 de El cáliz de fuego, Harry y los demás se ponen en marcha hacia los Mundiales de Quidditch, y Harry aprovecha el tiempo para aprender sobre medios de transporte mágicos.

Tal como dijo Molly, todos tienen que levantarse muy temprano (antes del amanecer, y están en agosto. Dado que el traslador se activa a las cinco y siete, todos se han tenido que levantar a las cuatro o incluso antes) para ir hasta el estadio en el que se celebrará el partido. Como es lógico, Harry tiene curiosidad, pues al vivir en el mundo muggle no conoce los medios de que disponen los magos para desplazarse, especialmente a largas distancias.

Ya conocíamos las escobas voladoras y los polvos flu, y sabíamos que los magos usan medios muggles como trenes, coches y autobuses, modificándolos mediante magia, pero aún habíamos oído poco de la aparición, que se había mencionado de pasada hasta el momento. Consiste básicamente en desaparecer de donde estés y reaparecer en el lugar al que quieres llegar, casi instantáneamente, tipo teletransporte.

Sin embargo, es complicada de dominar y las consecuencias de fallar al aparecerse pueden ser desastrosas, tanto por la salud del viajero y de los que le rodean como por el riesgo a quebrantar el Estatuto del Secreto, así que sólo se permite aparecerse a los magos que hayan pasado un examen, en una especie de equivalencia al examen de conducir muggle, pues sólo pueden optar a presentarse los magos mayores de edad.

Dado que muchos magos no saben aparecerse o no les gusta, el Ministerio de Magia aplica en situaciones como los Mundiales un medio de transporte introducido en este capítulo, los trasladores. Un traslador es cualquier objeto al que se le aplica un conjuro determinado (portus), y que permite a quien lo toca transportarse a otra localización. Se pueden embrujar para que se activen en cuanto se toquen, en cuanto lo permita el creador del traslador, o en un momento determinado, como sucede en este caso.

Es de admirar todo el despliegue del Ministerio de Magia para permitir a magos de todas partes acudir en secreto a ver el partido, situando trasladores en localizaciones específicas y a horas determinadas para que los asistentes puedan ir llegando de manera escalonada. Es en uno de estos sitios donde Harry, Hermione y los Weasley se juntan con una cara conocida, Cedric Diggory, y su padre Amos.

Aunque ya sabíamos de Cedric desde el libro anterior, es ahora cuando se nos presenta de forma más personal, como un tío majo que no da la mayor importancia a lo sucedido en aquel partido entre Gryffindor y Hufflepuff, al contrario que su padre, que lo ve como un gran logro del que fardar. Aquí Cedric y Harry están en la misma onda, pues ambos están dispuestos a dejar lo sucedido atrás, ya que al final lo que pasó no fue culpa de nadie, abriendo paso a su futura colaboración.

En todo caso, todos cogen el traslador a su hora y llegan al lugar en el que se celebrará la final de los Mundiales. Veremos qué sucede ahora.

Observaciones y curiosidades:
  • La despartición no es exactamente como Harry se imagina; cuando le sucede a Ron en Las Reliquias de la Muerte comenta para sí que es mucho peor de lo que creía.
  • En el original, no dicen que Charlie se apareció sobre unos viejecitos, sino sobre una señora mayor que estaba comprando sola.
  • En este capítulo hace su debut el conjuro convocador, accio, que atrae los objetos hacia el usuario del hechizo, y que le será muy útil a Harry en este libro. Su nombre viene del verbo latino accio, que significa "invocar" o "llamar".
  • Le explicación de Arthur sobre el montaje de los campos de quidditch con el fin de evitar llamar la atención de los muggles se corresponde con la explicación de Quidditch a través de los tiempos, aplicable también a los campos de quidditch a nivel nacional para la Liga. 
  • Cuando Amos Diggory dice que las entradas no le han salido tan caras como a otros, en el original dice más o menos lo mismo, pero da la impresión de que lo dice al ver con cuánta gente va Arthur, pues tantas entradas costarán lo suyo (probablemente sin saber que le han invitado).
  • Evidentemente, los Lovegood de los que hablan Arthur y Amos en este capítulo son Luna y su padre Xenophilius. Cuando van a su casa en Las Reliquias de la Muerte, Ron comenta que viven en la misma zona que La Madriguera. 

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